Abreviada biografía de una actriz con luz propia
Iniciada formalmente en la escena del Teatro- Estudio Casacuberta, Mimí Santángelo no podría haber sido indiferente al camino que habían emprendido su padre y posteriormente su madre –Esmeralda Rolland- en el grupo teatral independiente más importante de la capital entrerriana durante casi dos décadas.
Recorrer su trayectoria es reconocer un
trabajo que a la postre tendría su resonancia familiar.
Hacia 1953 Mimí realiza un reemplazo con
su grupo en una de las farsas que más éxito les deparó, El difunto Sr. Pic, de Charles Peyret Chappuis, por la que
Esmeralda Rolland recibe el premio de Talía,
y el grupo recibe varios elogios críticos más en Buenos Aires.
Luego participa en 1954 en La casa de los Montoya, de Juan Carlos Ghiano –en el personaje de una de las tres viudas, con la que viajan a Gualeguay al año siguiente-, en 1955 será “Carmen” en Las de Barranco, de Gregorio de Laferrere, en 1957 actúa en Mulato, de Langston Hughes, y en 1959 en La zorra y las uvas, de Guilherme Figueiredo, en el personaje de Melita.
Ya en el Teatro de verano del ’59 (febrero), el Casacuberta ofrece como segundo espectáculo en Paraná, la comedia El enfermo imaginario, de Moliére, donde Mimí interpreta a Angélica. El reparto se completaba con Magistrelli (Argán), Rolland (Antonieta), Inés Durán (Belina), Luis Maldonado (Buenafé y Beraldo), Eduardo Fornes (Cleanto), Antonio Ledesma (Diaforius), Héctor Brevo (Diafoirus (h)), y Eddie Mernes (Purgón).
De gira provincial
En marzo del año 1960, el grupo emprende
una temporada de verano, con auspicios de
Mimí interviene en 1960 en Títeres del mundo nuestro, del
victoriense Gaspar Benavento, y en el “Teatro de verano”, en la costanera media
del Parque Urquiza, en la farsa en dos actos de Federico García Lorca La zapatera prodigiosa[1]; en 1961
en El malentendido, de Albert Camus,
dirigida por su padre, que mantendrá dos años en cartel en el espacio propio de
Paraná.
Entre los años 1958 y 1963, Mimí hace de
Silvia en Delito en la isla de las cabras,
de Ugo Betti, en una remozada versión escénica del grupo, así como también
integra repartos de las populares Farsas
anónimas medievales de origen francés.
Posteriormente produce Mimí Santángelo
espectáculos para y con niños –Pedro y el
lobo, entre otras piezas-, y durante un tiempo se desempeña también como
funcionaria del gobierno local, dirigiendo el Teatro Municipal 3 de Febrero, de
Paraná.
Orgullosa de la carrera grupal y personal
en el teatro, conservó parte de su memoria gráfica y permitió la difusión de la
importante actividad independiente de aquellos años. Sus aportes, pues, exceden
la labor interpretativa, y dan cuenta de su compromiso cultural y con la
memoria escénica de la provincia.
El 22 de diciembre de 2020 falleció en Paraná. Vayan con estas palabras que repasan lo más destacado de su trayectoria, nuestro tributo.
[1] Véase “García Lorca en el Parque Urquiza”, ¿El Diario?, Paraná, sin fecha, Fondo Casacuberta, Archivo propio.
[1] Véase “García Lorca en el Parque
Urquiza”, ¿El Diario?, Paraná, sin
fecha, Fondo Casacuberta, Archivo propio.